El huracán Milton avanza a la zona oeste de Florida, y se espera que toque tierra durante la tarde del miércoles. Por ese motivo, las autoridades ordenaron evacuar a millones de personas dado el fenómeno climático.

Sin embargo, muchos residentes se niegan a abandonar sus hogares, haciendo que la situación se vuelva cada vez más crítica. En este contexto desolador, la zona de Tampa Bay, donde viven más de 3,3 millones de personas, enfrenta la posibilidad de una destrucción generalizada tras más de un siglo sin recibir el impacto directo de un huracán de categoría 3 o más.

Por ese motivo, miles de vehículos empezaron a movilizarse y quedaron atascaron en las autopistas de Florida antes de la tormenta, pero el tiempo para evacuar se acababa este miércoles.

En la misma línea, la alcaldesa de Tampa, Jane Castor, advirtió que una marejada ciclónica de 4,5 metros (15 pies) podría tragarse una casa entera. “Si estás ahí dentro, básicamente ese es tu ataúd”, sentenció.

La situación se volvió desesperante en las últimas horas debido a que las autoridades han advertido que cualquiera que se quede atrás debe valerse por sí mismo, ya que no se espera que los trabajadores de emergencias arriesguen sus vidas intentando hacer rescates en el apogeo de la tormenta.