Un reciente estudio del Ministerio de Economía bonaerense, dio cuenta de las desigualdades estructurales que afectan el efectivo ejercicio de derechos de las mujeres.

Según expresa el informe que presentó el Ministerio de Economía, en el mundo, las mujeres exhiben mayores obstáculos para participar en el mercado laboral en comparación con los varones y, a su vez, experimentan tasas de empleo más bajas, mayores niveles de desocupación y condiciones laborales más precarias, tales como jornadas reducidas, altos niveles de informalidad y menores salarios.
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Estas desigualdades marcadas por el género hacen que las crisis y las políticas públicas implementadas afecten de manera desigual a mujeres y varones. Si bien cada crisis es diferente, los estudios con perspectiva de género a nivel mundial han demostrado que, en dichos contextos, las brechas de desigualdad se incrementa.
A modo de cuestionamiento a las políticas implementadas por el gobierno libertario, “la actividad económica estuvo marcada por una recesión inicial producto de la devaluación y la caída de los ingresos. A esto se sumó un drástico ajuste del gasto público, acompañado por la implementación de políticas macroeconómicas contractivas que, en este trimestre, tuvieron un impacto directo en la destrucción de empleos, principalmente registrados, en la provincia de Buenos Aires. La paralización de la obra pública, los despidos de la administración pública nacional y la contracción de la industria producto de la recesión, fueron las principales causantes de la destrucción de cientos de puestos de trabajo. A lo largo del año, estas políticas de ajuste se mantuvieron, provocando un aumento sostenido del desempleo y la subocupación, junto con una reducción en la tasa de empleo, lo que impactó directamente en el crecimiento de la pobreza” detalla el escrito.
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Además se puntualizó que “este deterioro económico impactó inicialmente de manera más fuerte en las mujeres jóvenes. Sin embargo, en este trimestre se observa que las mujeres adultas también se suman al grupo de las más afectadas, lo que confirma que la crisis las está impactando con mayor intensidad. Esto se debe a la sobrerrepresentación de ellas en los sectores más vulnerables de la sociedad, donde las condiciones laborales y económicas son más precarias”.